domingo, 30 de marzo de 2008

The BEATLES - Capítulo 2

En el año 1964 protagonizaron la película, QUE NOCHE LA DE AQUEL DIA, se estrenó en Valencia en el cine Rialto, tuvo mucho éxito y estuvo tiempo en cartelera, la película no era muy buena pero las actuaciones que salían transmitían y contagiaban a toda la juventud, que acudía a verla, era emocionante y muy bonito, como si nos cambiara algo.

Al poco tiempo, la proyectaron en Godella, en su único cine, el CAPITOLIO, era invierno, vino tanta gente que la cola daba la vuelta por Villa Teresita, más de trescientos metros, la gente esperando entrar para poder verla, yo estuve en esa cola tan larga y pensaba que no iba a poder ver la película, pero sí, llegué a la taquilla y dando dos pesetas y cincuenta céntimos pedí una entrada por favor.

Con la entrada en la mano no me lo podía creer, iba a ver y a escuchar a mis ídolos, el cine estaba a tope, como el metro en horas punta, tuve que subir a general, todos de pie no se cabía mas. Había una gran emoción, que cuando apagaron las luces y empezó asonar la canción de QUE NOCHE LA DE A QUEL DIA, el cine se vino abajo, de griterío, todos chillando y cantando, las canciones conforme iban apareciendo en pantalla, era un histerismo colectivo, no sé como explicarlo, pero sé que te ponían los pelos de punta, cuando escuchábamos CAN’T BUY ME LOVE, THIS BOY, y otras muchas más, fue estupendo, me lo pasé muy bien, no olvidaré ese día tan feliz, yo lo hubiera titulado, “que día lo de aquel día”.

La Boda de Calatrabo

Me casé con Nachi un cuatro de agosto de 1974, era Domingo un día muy caluroso de verano.
En la ermita del Salvador de Godella, a las doce de la mañana. Los padrinos fueron mi madre y mi suegro Andrés que lucía un flamante traje, del príncipe de Gales.
Salimos de mi casa de la calle ancha, hacía un calor infernal, vestido de novio, con pajarita y cogido del brazo de mi madre Alfonsa con peineta y mantilla como las madrinas de verdad.
Andando y con toda la comitiva de amigos y familiares detrás, atravesamos todo el pueblo hasta llegar a la ermita, donde esperamos la llegada de la novia.



Apareció el coche, un SEAT 1430 blanco todo engalanado para los novios. Paró delante de las escaleras, se abrió la puerta y bajó del coche muy radiante Nachi, estaba guapísima toda de blanco, le resaltaban esos bonitos ojos verdes, me acerqué y saludándola con un beso, comenzó la ceremonia.
Entramos en el templo, al son de la marcha nupcial, había mucha gente, no cabían mas personas, nos colocamos delante del altar, los novios y los padrinos y en media hora, nos dimos el si quiero, nos declararon marido y mujer.


Nos hicimos las fotos en el altar, firmamos en la sacristía y salimos a la calle donde nos esperaban todos los invitados, aplaudiendo y gritando “viva los novios” sonó una fuerte traca como buen valenciano y después de felicitarnos, subimos al coche y nos dirigimos al convite, donde estaba todo preparado, esperando nuestra llegada.
Lo celebramos en el antiguo Casino Musical de Godella, fue muy sencillo, faltó el baile pero no había para más, recorrimos todas las mesas conversando, con los amigos y familiares, y cuando todo acabo nos despedimos, y nos fuimos a nuestro hogar.


Un pisito de ochenta metros en la calle pintor Pinazo de Godella muy pequeño pero bonito y todo nuevo.
De viaje de novios nos fuimos a la albufereta de Alicante, a las playas de San Juan, a un apartamento de mis tíos, lo pasamos muy bien viajamos por los alrededores Santa Pola, la Senia ,Callosa del segura ,rio Algar y un viaje, a la isla de Tabarca, en un barco de pesca ,donde cogí un buen mareo, no se me olvidara nunca ,fue un mes de mucho trabajo y de nadar mucho, fruto de esto, fue el encargo de nuestro primer hijo ,Mateo el que nacería, nueve meses después. Así comenzó mi matrimonio.
Ya os contaré más cosas.

domingo, 16 de marzo de 2008

The BEATLES - Capítulo 1

Los BITELS en español.
Fue en el año 1963 cuando escuché su primera canción. LOVE ME DO.




Todos los sábados, en mi casa íbamos al cine. No había otra distracción, nos arreglábamos todos, como si fuera un festivo, la cosa no era para menos, como si acudiéramos a un acto social, allí en el cine nos encontrábamos con todos los del pueblo, nos saludábamos y comentábamos las cosas que pasaban en esos momentos, unos para chismorrear y otros para ver las chicas que nos gustaban, todos muy elegantes y arreglados. En Godella solo había un cine, el CAPITOLIO, era de invierno y tenía una terraza de verano, de día era un trinquete y una pista de patinaje, donde íbamos a jugar y a patinar, por la noche colocaban sillas y lo convertían en cine de verano.


Fue allí donde escuché, la primera vez a los BITELS, había un descanso de quince minutos entre película y película que aprovechaban para hacer propaganda de anuncios y poner música, del estilo de ese momento: canción española. Cuando sonó la canción LOVE ME DO sentí una sensación muy extraña, que no había sentido nunca con otra música, creo que fue el comienzo de una nueva forma de vivir la vida y cambiar la música.
El estilo, la moda y el comportarse de la juventud, todo iba a cambiar, quien le iba a decir a ese maquinista del cine, que pinchaba esos discos que estaban cambiando los tiempos, colocando esa nueva forma de hacer música algo extraña como el idioma mismo, que no entendíamos pero nos transmitía unas nuevas sensaciones de vivir.


Todos los sábados siguientes esperábamos que llegara el descanso para oír esas canciones, que le siguieron otras, como PLEASE PLEASE ME, así fue como me hice un fan de esa música que la llevo toda la vida en el corazón, no conocí a ese maquinista, supongo que sería gente joven. Le doy las gracias, por haberme dado a conocer al grupo de artistas más famoso del mundo, que grabarían muchas más canciones y muchos más éxitos.

FUI TUNO

Tendría doce años, a mi vecino Alfonso le gustaba mucho cantar, la canción moderna que entonces se llamó YE,YE. Se compró una guitarra , como éramos amigos y salíamos en pandilla, me entró la afición y yo también me compré otra, íbamos a aprender a casa Ferrando “El sevillano”, un buen músico, también nos enseñaba solfeo.


Era el director de la rondalla del pueblo, LOS CLAVELES ROJOS, cuando aprendimos a tocar, pasamos a formar parte de la rondalla, estuvimos algunos años, hasta que se disolvió.
Teníamos tanta afición, que nos volvimos a juntar algunos miembros de la rondalla, entre ellos mi amigo Marco, que hacía hablar a la bandurria, salíamos todos los años a cantar los Mayos, era muy típico y tradicional, que nos contrataran los novios, para rondar y regalar flores, a las enamoradas.


Era el año 1962 fuimos la primera promoción, que inauguramos las escuelas de formación profesional E.P.L.A de Godella, el director, fue el padre Mariano de los flaires capuchinos. Comenzamos con unas tres clases y los talleres eran unos barracones que aun hoy, existen.
Allí conocí a mí amigo Marco, el de la bandurria. Ensayábamos todas las semanas, canciones de la tuna, en el año 1964 me puse a trabajar de electricista, me dejé el colegio y por las noches fui a estudiar a las escuelas de peritos industriales, donde me enrolé en dicha tuna. Estuve dos años, pues dejé los estudios, no me gustaba estudiar y preferí trabajar.
En la tuna me lo pasaba muy bien, íbamos a convites, bodas y bautizos, cobrábamos, comíamos y bebíamos hasta inflarnos. Siempre se perdía alguna botella de güisqui o de brandi entre las capas, teníamos muchas admiradoras, nos regalaban cintas bordadas o escritas, como recuerdo, también íbamos a las presentaciones falleras, bailábamos con todas las falleras que les gustaban que les cantáramos los CLAVELITOS.



Lo recuerdo muy bonito y divertido, el traje lo vendí por mil pesetas a otro tuno, de las pesetas de antes claro, esto es todo, VIVA LA TUNA…DE LOS PERITOS INDUSTRIALES….
Otro día os cuento mas, me voy a cenar y ver las noticias de las nueve, adiós con el corazón, que con el alma no puedo, chaoo